Todo bajo el cielo.

Autor: Matilde Asensi
(Alicante, 1962)

Título: Todo bajo el cielo.

Editorial: Planeta

Año: 2006

Portada:GettyImages.




















¿Qué hacen dos españolas en China, mientras en España el General Primo de Rivera accede al poder? Elvira y Fernanda, tía y sobrina respectivamente, tienen que viajar a China para hacerse cargo del cuerpo de la ex pareja de Elvira, asesinado por unos ladrones en Shanghai, las cuales nos sumergerán en el corazón del país en el primer cuarto del siglo XX.


"Se me había metido entre ceja y ceja que aquella viejecita del templo iba a ser una buena fuente de información, así que le dije al niño que , sin más demora, debíamos dirigirnos hacia el lugar donde la habíamos visto dos días atrás. Pero cuando llegamos, resultó que la anciana no estaba, aunque sí su cogín, y también una joven monja que limpiaba de barro las puertas y el atrio del templo con mucha energía. La lluvia no había cesado; fuera de los caminos de piedra que unían los edificios, podías hundirte en el fango hasta los tobillos, así aquella tarea parecía un tanto inútil. Biao habló con la barrendera para interesarse por la supuesta centenaria.

- Ming T´ien viene más tarde- le explicó aquélla- Es tan mayor que no la dejamos levantarse hasta la hora del caballo.

-¿Cual es la hora del caballo?- pregunte a Biao.

- No lo sé tai-tai, pero me parece que es a media mañana."

Merida



"Emerita Augusta" La Mérida Romana fué el lugar de asentamiento de legionarios licenciados con honor. La Mérida actual, patrimonio de la humanidad, es una ciudad viva en donde la chiquillería juegan en las calles, mientras los turistas entre tapa y tapa vamos de una a otra punta viendo sus murallas, teatro, circo...


Los Cuentos Famosos de Pepe Monagas


Autor: Francisco Guerra Navarro.
(1909-1961)_Pancho Guerra.
Título: Los cuentos famosos de Pepe Monagas.
Editorial Prensa Canaria: Diario Las Palmas y La Provincia.
Año:1994.
Portada: Agustín Millares Sall.
Personaje: Cho-Juaá.












Este Gran Canario de San Bartolome de Tirajana, describe la vida misma de la Gran Canaria de la post-guerra civil a través de los cuentos y entremeses recopilados y publicados en siete volúmenes por LA PROVINCIA. He de decir que su lectura al principio me costo, no entendía algunos giros y palabras, fue casi una traducción del dialecto canario. Hay que ver como hemos cambiado en cincuenta años, y sirva como ejemplo este cuento; el segundo del primer tomo:



































De cuando Pepe Monagas puso un puesto de Escobas en la Plaza

Maestro Esteban el Clueco tuvo un tiendejo a la entrada de San Roque, algo más arriba de la palma alta y cambada que era como hito del barrio, y que compartió con la de Doña Nieves, de la colonial del plaza de Santo Domingo, alta, airosa y popular fama. Maestro Esteban el Clueco se moría de solapada hambre detrás de su estrechujo y recomido mostrador. El inventario del chinchalillo podía hacerse en tres patadas: cuatro papeles de alfileres, docena y media de imperdibles, media de carretillas del 90, algunos calzoncillos con botones para camisas y varios, unas cuantas botellas empolvadas como pollitas en domingo, una caja de galletas de María, mediada y con bichos, un tabal o barrilillo de sardinas-arenques, que, aburridas de no venderse, se habían revirado y alzaban la cabeza, un tarro con boliches de chupar, otro con rapaduras y, por último, tres escobas y dos abanadores bien avasallados de polvajero y moscas.
Veces vendía tres pesetas, veces tres y un real.
Harto de balances que no llegaban a la muela trasera, y que lo metían en atosigantes velorios hasta las mismas luces del alba, dio en idearle salidas al mezquino negocio. Un día hizo a Costancita , su, mujer, un encargo importante.
- Costancilla- le dijo-, mañana por la mañana te vas a dir pa dentro y vas a comprar ca algún jarandino que vendan barato una cortinilla ramiada, así como vara y media de algún telejo que no este mal. Pero sin botarte, ¿eh?.
Doña Costanza trajo la tela y, ayudada por su hija Mariquita, endengó el cortinaje. Don Esteban el Clueco lo montó a lo largo de la verguilla vieja y le habilitó al tienducho un recovequito destinado a copas con chochoc, pejines y chorizosdel país. Pero el ron que expedía era del castó de los Caínes y del de los Barrabases los chorizos. Una cosa y otra fueron cayendo en los estómagos de los escasos clientes que se aventuraron a recalar por el timbeque como hubiera caído una mezcla de zotal, carabaña y cemento rápido. Algunos bebedores trincaron en bolina y no daban de sí ni con litros de sal de higuera. Otros estuvieron en filos de irse por el palo - con perdón-sin que los contuvieran las libras de chocolate tirando a tenique, ni otros entuyos al uso y comprobados.

Un día, Don Esteban el Clueco reunió a la entecada familia y le dió el parte de la derrota.

-¡ Adiós te digo, y no llores!- dijo.

Y se bajó a coger el fresco al muro de la marea.

Antes de la hecatombe, y en más de una ocasión, se había agarrado sus buenas calenturas con Doña Costanza, su señora.

Para barrer la casa, Doña Costanza echaba mano de las escobas de la tienda.

-¡ Arriba consumes la melcansía!- gritaba encochinado Don Esteban el Clueco.

-¿Pero no es igual, muchacho?- replicaba, bobalicona, la esposa-. ¿Qué más te da cogeslas d'iaquí, que resurtan al costo, que compraslas por aí, niño?

- ¡ No quiero empeloteras! Déjalas onde están. Y si te jasen farta, las compras y listón. Y luego tienes cuidao, ¿ entiendes?, que en tres patadas las desbirrifas toas.

-¡ Jum! Al móo te crees tú que son de las d'iantes, que ésas si que eran cosita asiada. Ahora con tres meneos, ya las tienes con la tomisa a rastras y el mondongo fuera.¡Pos ya!.

Una de las cuajadas tardes de la insula estaba Don Esteban el Clueco sentado detrás del Teatro, suspirando un hilito de aire y rumiando su desastre. Un mar de reboso iba y venía estruendosamente sobre la pedrera. Cierta ola larga trajo de pronto a la orilla el cabozo de una vieja escoba. Las ideas eran en la cabeza de Don Esteban el Clueco como correlones trasconejados en un inmenso majano, pero alguna vez tenía que obrarse el prodigio. Y fué ahora. La escoba que boto del mar delante de sus entristecidos ojos le recordó la observación de su Costancita. "Ahora, con tres meneos, ya las tienes con la tomisa a rastras y el mondongo fuera"- había dicho ella-." Si no duran nada, tiene que haber demanda", dedujo el hombre por prodigio. Y se le ilumino la frente, llena de esperanzas, de barros y espinillas.

En poco más de nada alquiló un cuartillo por frente al Zuleic, compró una carga de escobas y puso " almacén". Luego, sin importarle un pito el insulto de su hija Mariquita, que era una niña consentida de jueves en el Parque y arreo en las tardecitas de Triana, desparramó un tenderete en la Plaza. Pegó a vender. Y a ganar, que aquello era el "negocio de la china".
Alguna muerta mañana de la ciudad cruzaron el mercado Monagas y Venturilla el Taita. Gulusmeaban el trajín sin propósito alguno. Tropezaron con el puesto de el Clueco. Don Esteban no daba avío a despachar escobas.
-¡Miralo, y paresía sato!- comentó Pepe, cucando a Ventura, mientras contemplaba la encachorrada y su sudorosa figura de Don Esteban.
En un jacío de las ventas comentaron con el hombre la prosperidad del negocio.
-¡Malillo asuntejo,Estebita!
-Pos jello... Sí no me va mal.
De retirada, Monagas comentó con Venturilla:
- Un pisquejo de negosio ansina no me vendría mal a mí...
A los tres días, el compadre apareció con un puesto de escobas a la banda de Don Esteban. Para colmo de provocaciones lo pregonaba y todo.
-¡ A éstas, muchachas! ¡Escobas de palma rial a media peseta! ¡Lo mejor de islas, incluida Alegransa! ¡Barren pa dentro y pa fuera!
Vendía las escobas a dos reales. Don Esteban las tenía a tostón... El viejo se puso que cogía las vigas del techo. Otra vez se veía el Clueco con la quilla en el marisco. Entre tanto, lo volvía loco la inexplicable baratura de las escobas de Pepe.
"¡Eso no es vender, cristiano! ¡Eso es espirrifiar!", comentaba con los amigos de copeo.
Decidió vapulear a Ventura, convidándolo con largueza. El Taita se dejó querer, jugando para el pié del compadre, zorrongueándose con una de cal y otra de arena.
-Mire, mastro Esteban- acabó aconsejándole-, usté lo que tiene que jacer es robar las palmas y los pírganos. Verá como puede abajar los presios...
El Clueco se puso de acuerdo con un sinvergüenza, que guataqueaba palmas ajenas como si fuera un deleite, dijéramos.
Bajo el precio a cuatro perras.
Monagas la puso a real...
- ¡ Me caso en La Habana! Esto ya es cosa de barajas...- se volvió loco el viejo.
Por la tarde convidó a Pepe en El Camello.
-Anda, Pepillo, dimee cómo puees regalaslas.¡Porque eso es regalaslas, consio, no me digas tú a mí!
- Oh ya vei - se agachaba Monagas, mientras le daba sabias vueltas a un chorizo sollamado.
- ¡ Pero si no es posible, puñeta!- casi bramaba el Clueco - ¡ Si yo jasta robo el pílgano y robo la palma!
- Sí - replico Monagas, calmoso - pero es que yo se las robé a usté ya teminaítas, ¿ Se da cuenta?



¿quién quema los contenedores?



Sr. gerente creo saber quién es el culpaple de los incendios de contenedores en los últimos tiempos. No lo puedo demostrar porque el viento durante el tiempo que estuvimos acechando no cambió de dirección.
Mr. manager I know who is guilty of container fires in recent times. I can not show because the wind while we were watching did not change direction.

Así sucedió



Esta es la triste historia de unas oposiciones a capataz de limpieza viaria; y comienzo por la moraleja: no os fiéis de los sindicatos, ni de la empresa. Ante cualquier duda hay que contratar a un buen abogado y después se verá si estamos enfrentados a la empresa o junto a ella, según nuestros intereses. No sea que os convirtáis en un daño colateral como nos ocurrió a nosotros cinco: Jose Manuel, Pedro Pablo, Carmelo, Dovi y yo.
Desde el año 1994 no habían salido ningunas oposiciones, diez años de sequía laboral.
Por fin salían plazas: de operario de primera, conductor y capataces en régimen interno y de inspectores en abierto. La gran oportunidad que todos estábamos esperando. Claro, rápidamente empezaron a sacar listas de supuestos enchufados, para cada puesto.
Por fin llegó el día del examen , carnet de identidad, explicación de cómo hacerlo y de lo que no había que colocar.
Y nuestro periplo comienza desde el momento que a dos señores, uno Jose Monzón, miembro del comité de empresa por aquel entonces, y Carmelo Fidel, enlace sindical también en aquellos momentos, no se les ocurre nada más y nada menos que firmar el examen , y como es obvio fueron anulados ya que se vulneraba el anonimato.
Ellos reclaman y denuncian en el juzgado, basándose en argumentos que saben no son ciertos, para anular los puestos que ya desempeñábamos y que tanto sacrificio nos había costado conseguir. La empresa nos notifica a unos treinta y tantos aprobados (para cinco plazas), lo que ocurre y nos dicen que no nos preocupemos, que el Ayuntamiento se hace cargo entre otras razones porque lo tenemos recogido en el convenio colectivo. Es en este justo momento donde se comete el error al delegar en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria la defensa de dicha impugnación, aunque las posibilidades de aprobado fuesen de 1/6, dejando de ser parte en la causa, y ser un espectro dentro del Limbo contencioso- administrativo
Se gana el juicio en primera instancia, recurren y se pierde.

A todo esto en el servicio ya han habido elecciones sindicales y gana UGT por mayoría.
Poco después son las elecciones municipales y ganan los socialistas.

Acaban de tomar posesión del cargo el nuevo gobierno municipal ( o desgobierno como están demostrando hasta el día de hoy) cuando sale la resolución del recurso interpuesto por Jose Monzón en el que le dan la razón.
El gerente nos convoca a todos los mandos intermedios a una reunión para presentarse. Él en ese instante tenía ya la sentencia en su mesa y no dijo nada, de forma negligente estaba dejando correr los plazos para poder recurrir, nos estaba, de forma grave, dejando ante la indefensión.
La semana siguiente intrigados por lo que se estaba comentando en los mentideros del servicio, subimos a las oficinas, miércoles , jueves y viernes, no se preocupen nos decia Suso, abogado del servicio, estamos en ello , no va a pasar nada, el resto callados, alguno logró gesticular un forzado saludo , qué sensación de apestados.
El viernes a última hora Alicia Espino , jefe de personal del servicio pasa discretamente a nuestro lado con una carpeta dirección al despacho del Sr Marrero, gerente del servicio. Acaba de vencer el plazo para recurrir y lleva en la mano nuestra sentencia de defenestración para su firma.
Al día siguiente, sábado, le llega a Carmelo un burofax, indicándole que el próximo día laboral se tiene que incorporar como peón en su antiguo puesto. Cobardes, que falta de principios y de ética. Por supuesto inmediatamente nos pusimos en contacto con la " buena nueva". A la mujer de Carmelo con la noticia, directa a úrgencias.
El lunes a las Torres, los que todavía no habíamos recibido el burofax, nos lo imprimieron sobre la marcha y a firmar el recibí ; ya no éramos apestados, ahora leprosos.

Reunión con Suso: " ... no es tanto el dinero que pierden...", todavía se me clavan las palabras, como duelen , es eso dinero, pues sí , entre otras cosas perdí más de doscientos Euros mes, aparte de las horas extrordinarias. Perdí el trabajo por el que llevaba luchando tantos años, años de estudio, de cursos, de sacrificios, de hacer filigranas para coordinar la asistencia a las clases.


A nuestros familiares y amigos más allegados les costó entender la situación, pero los vecinos y conocidos pensaron que habíamos hecho algo, de hecho, a un vecino le llegué a contestar de malas maneras que fue por meter la mano en la caja, nos habían cogido traficando con material del servicio, que distribuiamos por los rastros de la Isla.


Luego comenzaron los despropósitos de algunos compañeros, envidiosos y egoistas, que meten cizaña con frases como:"... lo siento por tí, pero por los otros" y con el mismo cuento a cada uno de nosotros, todavía no se como no le metí un par de piñas a alguno. El colmo fue durante una asamblea de trabajadores, mientras estaba exponiendo un tema , uno de los gansos del servicio con el que había tenido varios rifi rafes, soltó a viva voz: " a barrer, cabrón" con risotadas generales; no sé cuantas veces conté hasta diez pero terminé de hablar.


Abogados: rápidamente nos pusimos en manos de D. Cosme para los contencioso administrativo y en lo laboral con doña Isabel, pedimos consejo a infinidad de amigos que tenían algo que ver con la justicia, todos coincidian en lo mismo: la desidia con la que había actuado el Ayuntamiento.Claro, representábamos un problema menor; éramos sólo cinco plazas de las cientos de ellas que se denuncian, sin apoyo del Comité ¿la defensa de los intereses de los trabajadores se sustituye por la defensa de sus propios intereses, al querer acceder a esas plazas algunos miembros del propio Comité? Que se sepa con claridad, que los que han sustituido a los cinco capataces que obtuvieron su plaza por oposición fueron precisamente, cinco miembros del Comité de Empresa.???? Esas plazas era necesario cubrirlas para la mejora del servicio ¿no podían habernos dejado en nuestros puestos continuando la labor que veníamos desempeñando durante más de año y medio? Claro, la sentencia había que ejetucarla rápidamente interpretándola de determinada manera, sin pedir aclaratoria a la misma. Una indefensión más.
En definitiva, tuvimos que recurrir al abogado que costeamos nosotros, porque ni al Comité con su presidente Sergio Ruiz a la cabeza, ni al propio Ayuntamiento, que permite que la Justicia ponga en duda la legalidad de las oposiciones celebradas, les importa nada nuestra plaza.
Comenzamos por la recopilación de datos: recortes de prensa, documentación relativa al exámen, el expediente del propio juicio.
El abogado D Julio Cabrera perteneciente a los Servicios Juridicos del Excmo Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria aporta como prueba las páginas impares del BOP. Las pares solo dicen "tonta's". Las actas del Tribunal calificador, la palabra del Secretario del Ayuntamiento y del propio Tribunal y colaboradores para que explicaran el procedimiento empleado y el desarrollo y corrección del ejercicio, así como los propios exámenes, no los debió considerar importantes, puesto que no los pidió.
En medio de tanto disparate se nos convoca a una reunión en Las Torres un año despúes con Alicia, Suso y el Sr. Marrero en el que con un informe favorable de los Servicios Juridicos del Ayuntamiento podríamos incoporarnos de nuevo a nuestro puesto hasta la resolución de los distintos conflictos y que al día de hoy todavía no se sabe nada. Por supuesto el comité de empresa se enteró y cara a cara se le preguntó a Sergio Ruiz, Sebastian León y Sergio León en el cuartelillo de Pamochamoso a primera hora cuál iba ser su postura: la respuesta que nos dieron no tiene importancia , porque lo que pensaban lo dijeron horas más tarde sin tener en cuenta que podrían tener testigos de la conversación entre los dos Sergios: "...mientras pueda éstos no van a volver a ser capataces..."

Estábamos desencajados , a Pedro Pablo le salieron pólipos en el estómago, todos demacrados, Dovi cargando con la muerte de su hermana y madre en menos de seis meses le hacen este regalo el mismo día de su cumpleaños,Carmelo un volcán de nervios a punto de explotar, Jose Manuel los nervios se lo han estado comiendo hasta que antes de ayer le dió un infarto del que ha escapado milagrosamente gracias a que Suso lo llevó al Hospital y lo intervinieron sobre la marcha, yo empezaba las vacaciones con cambios de humor constantes, con una sensación de frustación que no se me ha quitado hasta la fecha, con miles de pensamientos negativos para los que he tenido que hacer un esfuerzo diario para desterrar de mi cabeza.

Lo que es cierto es que llevamos dieciocho meses luchando en los tribunales , en casa , con cartas dirigidas al Alcalde, al Gerente, a todos los que tienen responsabilidad en este asunto, y que nadie se ha dignado en contestar por escrito, nadie ha sentido la necesidad moral y profesional de reparar el daño causado, de velar por los intereses de unas plazas ganadas bajo la más estricta legalidad...Pero claro, insisto, son sólo cinco plazas que no suponen nada para la inmensidad de litigios, cuestiones, ilegalidades en las que están ocupados. Pues señores, también existe reponsabilidad por estas sólo cinco plazas, de ellas tienen que responder todos y cada uno de los que han provocado o dejado pasar esta situación.
Mientras tanto, los días pasan....

Barcelona

La Barcelona de Gaudí, Las Ramblas, la iglesia de Sta. María del Mar , pintores, el Mercado de La Boquería, la plaza Madrid, El Barrio Chino ( no se parece al de Maki Navaja) y por supuesto los Barrenderos.